Ciencia

Todo lo que debes saber sobre el sulfato de cobre

El sulfato de cobre es un compuesto que mantiene cinco moléculas de agua, esto quiere decir que es pentahidratado, estás moléculas son muy resistentes a los cambios de temperatura, por lo que el compuesto no requiere de estabilizadores. Más información en páginas web como https://www.sulfatodecobre.org/.

Estas moléculas cuando el sulfato está sometido a temperaturas muy altas, se van perdiendo por la acción del calor, y se van eliminando progresivamente, esto significa que primero pierde dos moléculas, luego dos y al final la última cuando ya ha alcanzado los 200°C, en este punto de transforma en óxido de cobre.

¿Por qué el sulfato de cobre es azul?

Este compuesto químico es azul precisamente por presencia de agua en su interior, cuando se transforma en óxido de cobre que ya ha perdido las moléculas se vuelve un polvo blanco cristalino.

Esta propiedad lo vuelve muy corrosivo para los metales, y puede oxidarlos con facilidad si mantiene contacto con ellos. El contacto del humano con el sulfato de cobre también está prohibido y deben usarse las medidas de seguridad pertinentes, como el uso de guantes, lentes de protección para los ojos y bata de laboratorio.

Problemas por el contacto con el compuesto químico

Mantener contacto con el sulfato de cobre puede provocar enrojecimiento en la piel, y llegar a causar dermatitis, el producto es ampliamente toxico por lo que puede generar problemas graves de salud, si la persona lo consume puede sufrir daños gastrointestinales, diarreas, vómitos y hasta colitis.

Si los ojos de la persona cuando manipula el producto no tienen protección y llegan a tener contacto con el sulfato cuproso, puede provocar visión borrosa, enrojecimiento de la córnea y daños a futuro en la visión. Por eso se debe seguir una serie de pasos y medidas antes de manipular este compuesto químico.

El producto se considera tan fuerte que es usado como pesticida en la agricultura, también es utilizado como alguicida para el tratamiento de las aguas residuales que son drenadas en alcantarillas y redes cloacales.

Son muchas las funciones que tiene el sulfato de cobre para eliminar bacterias, y demás agentes patógenos que pueden deteriorar el agua y dañar los cultivos. Por eso se considera un material de cuidado, e inclusive en caso de incendios si el sulfato de cobre mantiene contacto con las llamas puede provocar gases tóxicos e irritantes, ya que el sulfato cuproso es altamente inflamable más no es explosivo.